domingo, 9 de agosto de 2015

Cordura descartada...

Otro día más que no puedo dejar de pensar, pensar en el -¿y si?, pensar que todo pordria haber sido diferente desde un principio si tan sólo, con o sin voz ni voto, hubiese regido mi realidad.
Esta chica, cavizbaja, somnoliento aliento el que tengo, que no puedo dejar de murmurar que entre el humo y cortinas, que todo a sido siempre un error. Por que el primer error de mi vida fui yo... Pensar todo lo que pude y no e echo, pensar en todo lo que dije y debería haber callado, todo lo que criticaba, que mal e pensado...
Sombría la niebla de mi habitación me acoge y arropa como si fuese algodón, que entre la frangancia de aquella marihuana, mi cabeza daba vueltas... Querer crecer queriendo, acabar por creer desvaneciendo... Y es que la suerte de las feas las Guapas las desean, ¿pero y si ni guapa que soy ? Todo me vino siempre con una capa de acero, para endurecer un poco más el corazón, que para mi edad ya está muy viejo... Y este texto se queda entre palabras... Para que seguir escribiendo si todo lo que digo se queda en mi garganta... Y es que, de que merece la pena seguir levantando cabeza, si esta cabeza hace mucho que perdió su cordura... Entre las cuerdas de mi armadura, con hilo de cristal reparo mi corazón roto... Que me atravesaron como espadas sus palabras... Pero razón no le faltaba... Demasiados pájaros e tenido en mi interior que sólo con la jaula me quedé yo.
Para que seguir mintiendo, ¿a alguién le va a importar? Si es que yo sola me e ganado el que a nadie me pueda soportar. Y es que las palabras duelen, y más si es con verdad. ¿que verdad hay más pura que la de que está vida es una total locura?.
Entre cortes y labios ensangrentados por el odio y el rencor hacia si mismo, me despido para volver a mi rincón, al que sin decir más nada que un adiós, siempre está conmigo, y es que solo delante de el puedo llorar, ni el espejo me quiere ya, y mi reflejo se fue dejando marcas en mi piel que siempre me acompañarán...

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